EL VASO MEDIO...

Maxi Moralez, el volante trato de crear juego pero le falto compañía en la ofensiva.

Vélez cerró su participación en la Copa Ciudad de Córdoba con una convincente derrota ante Lanús por 2 a 0. El equipo de Gareca regaló los primeros 45 minutos y no supo empatarlo en el segundo tiempo. Un partido al estilo 2008, con más fantasmas que certezas. Complete el título como crea adecuado.

El conjunto de Liniers llegaba al segundo partido de este triangular con una victoria por 2-0 ante Talleres, pero sin la presencia de su máximo goleador en la pretemporada Rodrigo López. La otra incorporación, Sebastián Domínguez, jugó para la reserva. De conseguir la victoria, Vélez sería el campeón de la Copa y cerraría la pretemporada sin conocer el empate ni la derrota.

Pero enfrente estaba Lanús, el primer rival “serio” del año. Y el juego de Lanús pasó por arriba al de Vélez en los primeros 45 minutos. Los jugadores del fortín parecían no entender su posición en la cancha. Todavía sigo pensando si la defensa era con línea de 3 o de 4, ya que Cubero subía siempre y Papa nunca. El equipo no presionaba en el campo contrario, Morález no se podía desprender de su marca y los “delanteros” no se alejaban del círculo central.

El gol de Lanús iba a llegar mediante un tiro libre desde la izquierda. La pelota pica en el borde del área chica, Montoya la ve pasar. De ahí en más, poco y nada. Recién a los 34 parecía que Vélez se enojaba y lo salía a buscar, pero el tiempo no alcanzaba. Punto y al vestuario.

En la segunda mitad, se vio un Vélez más decidido, con mas empuje y creando 5 situaciones claras de gol en los primeros minutos de juego. ¿Por qué no empató el partido? Porque Vélez jugó sin un delantero de área. Nanni y Piris tuvieron buenos movimientos, pero eso también lo hacen los volantes, de ellos se espera el gol y Vélez no generó jugadas mano a mano con Bossio (ni una), todos los remates fueron de afuera del área.

Y cuando un equipo no puede entrar al área rival, las chances de ganar un partido disminuyen considerablemente. Para colmo, una pelota perdida por Papa, la recupera Sand a 5 metros de su área, una combinación por el centro de campo, pase a la izquierda, desborde y buscapié para que el mismo Sand sentencie el 2-0. Después de ese gol, Vélez bajó mucho su rendimiento. Ni los cambios (Díaz, Cabral y Coronel) pudieron reanimar al equipo.

La pretemporada termina con muchos interrogantes y poco tiempo antes del primer partido oficial. ¿Podrá Vélez depender de López? ¿Seguirá Vélez siendo el Plan B de Fabbiani? ¿Cómo volverán Tobio, Bella, Velázquez y Cristaldo? ¿Puede Montoya ser el arquero de Vélez? Por otro lado, es para destacar el buen rendimiento de Otamendi, el mejor del partido.

fuente : dale fortin